La Meditación.

Toma conciencia de tus procesos mentales, de cómo funciona tu mente. En el momento en que adquieres con­ciencia del funcionamiento de tu mente, te separas de ella. La misma conciencia significa que tú estás más allá de la mente: te mantienes aparta­do, eres testigo. Y, cuanto más alerta estés, más capaz serás de notar los in­tervalos que separan la experiencia de las palabras. Los intervalos están allí, pero tú estás tan poco alerta que nun­ca los percibes. Entre dos palabras siempre hay un intervalo, por más im­perceptible o pequeño que sea. Si no fuera así, las dos palabras no podrían seguir siendo dos: se transformarían en una sola. Entre dos notas musica­les, siempre hay un intervalo, un si­lencio. Dos palabras o dos notas no podrían ser dos si entre ellas no exis­tiera un intervalo. Siempre hay allí un silencio, pero uno debe estar realmen­te concierte y atento para percibirlo.

Cuanto más consciente estés, más lenta se vuelve la mente. Siempre es proporcional: a menor grado de con­ciencia, tanto más rápido trabaja la mente; y, a mayor grado de concien­cia, tanto más lento será el funciona­miento de la mente. Cuando estás más pendiente de la mente, más lenta se vuelve, mientras que aumentan los in­tervalos que separan a dos pensa­mientos. Entonces, puedes notarlos.

Es como una película. Cuando el proyector pasa la cinta en cámara len­ta, puedes ver los intervalos. Si levan­to la mano, esto se divide en miles de partes, cada una de las cuales será una sola foto. Si estas miles de fotos pa­san ante tus ojos a una velocidad tal que no llegas a ver los intervalos, ve­rás la elevación de la mano como un proceso. Pero, en cámara lenta, pue­des percibir los intervalos.

La mente es como una película: los intervalos están allí. Cuanta más aten­ción le prestes a tu mente, tanto más los percibirás. Es como el cuadro ges­talt: un cuadro que contiene al mismo tiempo dos imágenes diferentes. Uno puede ver una imagen o la otra, pero no puede ver las dos al mismo tiempo. Puede ser un cuadro de una anciana y, al mismo tiempo, de una joven. Pero, si has visualizado una de las dos imá­genes, no puedes ver la otra; y, cuan­do has visualizado la otra, se pierde la primera. Aun cuando sepas perfecta­mente bien que has visto las dos imágenes, no puedes ver ambas simultá­neamente.

Lo mismo sucede con la mente. Si ves las palabras, no puedes percibir los intervalos; y, si ves los intervalos, se te pierden las palabras. Toda pala­bra es seguida de un intervalo, y todo intervalo es seguido de una palabra, pero no puedes registrar ambos de manera simultánea. Si te concentras en los intervalos, se pierden las pala­bras y te ves arrojado en la medita­ción.

Una conciencia que sólo se con­centra en las palabras no es meditati­va, mientras que una conciencia que se concentra únicamente en los inter­valos lo es. Cada vez que tomes con­ciencia de los intervalos, se perderán las palabras. Si observas con aten­ción, no encontrarás palabras: sólo hallarás un intervalo.

Puedes percibir la diferencia entre dos palabras, pero no puedes registrar la diferencia entre dos intervalos. Las palabras son siempre plurales, mien­tras que el intervalo es siempre singu­lar: "el" intervalo. Se funden y se transforman en uno. La meditación implica concentrarse en el intervalo.

Me gusto pensar en los intervalos...pensarlos??, quizás la magia está en sólo sentirlos...curiosamente compartiamos con un amigo, algo relacionado con las palabras... (no sé si tenga que ver ), pero hace referencia a las palabras, lo comparto Natha, al menos es una visión del escritor y su relación con las palabras... el Intervalo?? quizás ser más conscientes del espectáculo...


(Concepción de la novela, Virginia Woolf)

Examinemos, por un instante, un cerebro normal en un día cualquiera. La mente percibe miríadas de impresiones triviales, fantásticas, ya efímeras, ya grabadas con la precisión del acero.

Ellas surgen de todas partes, en un incesante espectáculo de innumerables átomos, y a medida que caen, a medida que adquieren forma en la vida del lunes o del martes, el acento cae diferente al de antaño; el momento de importancia ocurrió aquí y no allá; de modo que si el escritor fuera un hombre libre y no un esclavo,
si pudiera escribir lo que desea y no lo que debe, si pudiera basar su obra en su propio sentimiento y no en convencionalismos, no habría trama, ni comedia, ni tragedia, ni interés amoroso, ni catástrofe en el estilo establecido.
La vida no es una serie de lámparas dispuestas sistemáticamente; la vida es un halo luminoso, una envoltura semitrasparente que nos rodea desde el nacimiento de nuestra conciencia hasta el fin. ¿No es acaso la tarea del novelista coger este espíritu cambiante, desconocido, ilimitado, con todas sus
aberraciones y complejidades y con la menor mezcla posible de los hechos exteriores y ajenos?

Saludos!!

tao2012 escribió:
"Cortar la cabeza" de Juan el Bautista, desde un enfoque esotérico o interno, es también Zen, Tao, Chan.

Namasté!!!

P.D.: [Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]

Nos regalarías el enfoque desde lo esotérico?... Gracias!!!

Creo que para los que siguen este post este vídeo les puede interesar, es una entrevista de Daniel Lumera y toca muchos de los temas que se han expuesto aquí.
Un abrazo.

[Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo] from [Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo] on [Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo].

Nathalia escribió:

tao2012 escribió:
"Cortar la cabeza" de Juan el Bautista, desde un enfoque esotérico o interno, es también Zen, Tao, Chan.

Namasté!!!

P.D.: [Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]

Nos regalarías el enfoque desde lo esotérico?... Gracias!!!

[Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]



[Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]

Namasté!!!

P.D.: ¿Qué dice ese Daniel Lumbreras o como se llame?

tao2012 escribió:

Nathalia escribió:

tao2012 escribió:
"Cortar la cabeza" de Juan el Bautista, desde un enfoque esotérico o interno, es también Zen, Tao, Chan.

Namasté!!!

P.D.: [Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]

Nos regalarías el enfoque desde lo esotérico?... Gracias!!! [Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]

Es obvio, ¿no? El Bautista está bautizando hasta el momento en que aparece o penetra el Salvador del Mundo en los cuerpos de la personalidad, transmutando, en el momento de su bautismo con agua. Es entonces cuando el Bautista (la humana personalidad) dice que es él quien ha de ser bautizado por Cristo & no al revés. Y dice: “Es necesario que él crezca, pero que yo mengüe”.

[Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]



[Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]

Namasté!!!

P.D.: ¿Qué dice ese Daniel Lumbreras o como se llame?

Daniel Lumeras nos habla de... La Búsqueda y su definición personal de ella, El Modelo Evolutivo Solar, como conciencia de un modelo no jerarquico en la relación con la naturaleza sino horizontal. El Sol, un Umbral, como un portal hacia nuestro interior. El Código de la Luz, explicando como para él la luz es basicamente inforamación que no sotros no comprendemos, pero que nuestro ADN reconoce perfectamente. La pareja como expositor de nuestro propio mundo interior. El sexo y como todo es erótico, la naturaleza es erótica, Dios es erótico, la sexualidad consciente. La muerte y afrontar la realidad de la misma con amor y comprendiendo que es una etapa mas, y una etapa para bendecir, también como prepararse o abrirse a ella. El apego, comprender que lo que se Ama no se posee, La sombra, aceptarla como parte de nuestro trabajo y mundo interior. El proyecto ANNUR un proyecto de casas sostenibles y energeticamente vivas.
Namaste

Y cada corazón, tornad y recibir al Rey
(así comienza el video…)

Humilde en su cuestionamiento, al reconocer que Dios está con Jesús, temeroso al igual que uno mismo al momento de ser claros en comprensión…

Es hermoso, el video que nos enseñas y regalas Tao, personalmente, me siento en luz cuando lo escucho… nacer de nuevo, desde el espíritu y del agua, morir y nacer de nuevo, vaciarse y volver a ser… no sé sabe de dónde viene, sólo está manifestado, se le relaciona con una llama que baja y se posesiona en los corazones, o con la paloma que se manifestó desde los cielos…

Hasta que, en una sola noche, en una hora, en un instante, los labios del espíritu se entreabrieron y pronunciaron la sagrada palabra, «Vida»; y la Vida se hizo carne en un infante que dormía arrullado en el regazo de una virgen, en un establo en que los pastores guardaban sus rebaños contra los asaltos de las feroces alimañas de la noche, y contemplaban absortos y maravillados al humilde recién nacido, que reposaba en el pesebre.
En una noche, en una sola hora, en un instante el Espíritu descendió del centro del círculo de la luz divina y me miró con los ojos del alma. De esa mirada nació el Amor, que hizo su morada en mi corazón.
Este Amor grande, arrebujado en lo más íntimo de mis sentimientos, ha convertido el dolor en Alegría, la desesperanza en felicidad, la soledad en paraíso.

El Amor, el gran Rey, ha devuelto la vida a mi yo muerto; ha encendido nuevamente la luz en mis ojos cegados por las lágrimas; me ha levantado desde el polvo de la desesperación hasta el reino celestial de la Esperanza.
Porque todos mis días fueron como noches, amada mía. Pero he aquí que la aurora ha llegado;
emergerá el Sol. Porque el aliento del Niño Jesús ha llenado el firmamento y se ha mezclado con el éter. La vida que antes estuviera llena de pesadumbre y aflicción, rebosa ahora de júbilo, porque los brazos del Niño te estrechan en torno mío y cobijan mi alma.

Jesús : hijo de Dios….Humano", del latín "Hominum", que significa "Hijo de Dios".[/justify]

Saludos!!

Natha escribió:

tao2012 escribió:

Nathalia escribió:

tao2012 escribió:
"Cortar la cabeza" de Juan el Bautista, desde un enfoque esotérico o interno, es también Zen, Tao, Chan.

Namasté!!!

P.D.: [Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]

Nos regalarías el enfoque desde lo esotérico?... Gracias!!! [Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]

Es obvio, ¿no? El Bautista está bautizando hasta el momento en que aparece o penetra el Salvador del Mundo en los cuerpos de la personalidad, transmutando, en el momento de su bautismo con agua. Es entonces cuando el Bautista (la humana personalidad) dice que es él quien ha de ser bautizado por Cristo & no al revés. Y dice: “Es necesario que él crezca, pero que yo mengüe”.

[Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]



[Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]

Namasté!!!

P.D.: ¿Qué dice ese Daniel Lumbreras o como se llame?

Daniel Lumeras nos habla de... La Búsqueda y su definición personal de ella, El Modelo Evolutivo Solar, como conciencia de un modelo no jerarquico en la relación con la naturaleza sino horizontal. El Sol, un Umbral, como un portal hacia nuestro interior. El Código de la Luz, explicando como para él la luz es basicamente inforamación que no sotros no comprendemos, pero que nuestro ADN reconoce perfectamente. La pareja como expositor de nuestro propio mundo interior. El sexo y como todo es erótico, la naturaleza es erótica, Dios es erótico, la sexualidad consciente. La muerte y afrontar la realidad de la misma con amor y comprendiendo que es una etapa mas, y una etapa para bendecir, también como prepararse o abrirse a ella. El apego, comprender que lo que se Ama no se posee, La sombra, aceptarla como parte de nuestro trabajo y mundo interior. El proyecto ANNUR un proyecto de casas sostenibles y energeticamente vivas.
Namaste

Suena muy " allowscriptaccess="always" allowfullscreen="true"exótico" todo eso... ¿no es un uevo apego definir al proyecto con un nombre concreto?
"No conociendo su nombre, lo llamé: Tao", "el Tao que puede4 expresarse con palabras no es el verdadero Tao".

Namasté!!!

P.D.: HORIZONTE ROCK

[Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]

Deseando encotrar el camino de la periferia al centro... y en el retorno encontrar los pasos que me lleven hasta casa.

La meditación es volver a CASA

Hay en ti dos planos: el plano de lo mental y el plano de lo no mental. O bien, permíteme ponerlo en estos tér­minos: el plano en el cual estás en la periferia de tu ser, y el plano en el cual estás en el centro de tu ser. Todo círculo tiene un centro, que puedes conocer, o no. Tal vez ni siquiera sos­peches que hay un centro, pero debe haberlo. Eres una periferia, eres un círculo: hay un centro. Sin un centro, no podrías existir. Hay un núcleo de tu ser.

En ese centro, ya eres un Buda, un siddha, alguien que ya ha llegado al centro. En la periferia, estás en el mundo: en la mente, en los sueños, en los deseos, en las ansiedades, en mil y un juegos. Y eres las dos cosas.

Poco a poco, puedes ir pasando de la periferia al centro y del centro a la periferia, muy suavemente, así como entras y sales de tu casa caminando. No creas una dicotomía. No dices: "Estoy afuera de mi casa, ¿cómo pue­do entrar?" No dices: "Estoy dentro de mi casa, ¿cómo puedo salir?" Hay sol afuera, está cálido y agradable. Te sientas afuera, en el jardín. Luego, ha­ce más y más calor, y comienzas a transpirar. Entonces, ya no es agrada­ble: simplemente, te levantas y entras a la casa. Allí está fresco; no es incó­modo. Ahora, está agradable. Sigues entrando y saliendo.

De la misma manera, un hombre con capacidad de conciencia y de comprensión pasa de la periferia al centro, y del centro a la periferia. No se queda estancado en ningún lugar. De la plaza comercial al monasterio, del sansar al sannya, de estar extro­vertido a estar intravertido. Sigue mo­viéndose continuamente, pues éstas son sus dos alas, no se oponen. Pue­den estar equilibradas en direcciones opuestas; tienen que estarlo. Si las dos alas estuvieran del mismo lado, el pájaro no podría levantar vuelo hacia el cielo. Deben estar en equilibrio, tie­nen que estar en direcciones opuestas, pero igual pertenecen al mismo pája­ro y le sirven al mismo pájaro. Tu in­terior y tu exterior son tus dos alas. Hay que recordar esto con mucha pro­fundidad, ya que hay una posibili­dad... de que la mente tenga una ten­dencia a quedarse estancada. Hay gente que se queda estancada en la plaza comercial y dice que no puede salir de ella y que no tiene tiempo pa­ra la meditación. Afirman que, aunque tuvieran tiempo, no sabrían cómo meditar y que no creen que sean capa­ces de hacerlo. Dicen ser mundanos: ¿cómo podrían meditar? Son materia­listas: ¿cómo podrían meditar? "Des­graciadamente, soy extravertido, ¿có­mo volverme hacia mi interior?", di­cen. Han elegido una sola de sus alas. Y, por supuesto, es natural que esto provoque cierta frustración. Con una sola ala, seguro que habrá frustración.

Por otro lado, hay gente que se cansa del mundo y escapa de él: acu­den a los monasterios y al Himalaya, se transforman en sannyasins, mon­jes. Empiezan a vivir aislados, forzán­dose a una vida de encierro en sí mis­mos. Cierran los ojos, cierran todas sus puertas y sus ventanas, se transfor­man en mónadas (sin ventanas) de Leibnitz y entonces se aburren.

En la plaza comercial, estaban har­tos, estaban cansados, frustrados. Se estaba transformando en un manico­mio; no podían hallar descanso. Ha­bía demasiadas relaciones y pocas va­caciones, no tenían espacio suficiente para ser ellos mismos. Estaban cayen­do en las cosas, perdiendo su esencia. Se volvían cada vez más materialistas y cada vez menos espirituales. Esta­ban perdiendo su rumbo. Estaban per­diendo la conciencia misma de existir. Huyeron. Hartos, frustrados, se esca­paron. Ahora, están tratando de vivir aislados, haciendo una vida introver­tida. Más tarde o más temprano, se aburren. Nuevamente, han elegido otra ala, pero otra vez eligen una sola. Éste es el camino de una vida asimé­trica. Han caído nuevamente en la misma falacia pero del polo opuesto.

No estoy a favor ni de ésta ni de la otra. Me gustaría que fueras capaz de permanecer en la plaza comercial y, al mismo tiempo, de ser meditativo. Me gustaría que te relaciones con la gen­te, que ames, que te muevas en miles de relaciones (que te enriquecen) y aun así puedas cerrar las puertas y a veces puedas tomarte un descanso de toda relación, para poder relacionarte también con tu propio ser.

Relaciónate con otros, pero tam­bién contigo mismo. Ama a los de­más, pero también a ti mismo. ¡Sal! El mundo es hermoso, está lleno de aventuras; es un desafío, y te enrique­ce... ¡No te pierdas la oportunidad! Siempre que el mundo llame a tu puerta y te convoque, ¡ve! Enfréntalo sin temor: no hay nada que perder; tienes todo por ganar.

Pero no te pierdas. No sigas más y más hasta perderte. A veces, retorna a casa. A veces, olvídate del mundo:

ésos son los momentos de medita­ción. Cada día, si quieres ser equili­brado, debes equiparar lo interior y lo exterior. Ambos deben tener el mismo peso, de manera que tu interior nunca se torne asimétrico.

Esto significa la afirmación del maestro zen: "Camina en el río, pero no dejes que el agua te toque los pies." Está en el mundo, pero no seas del mundo. Está en el mundo, pero no dejes que el mundo esté en ti. Cuando llegas a casa, llegas a casa: como si el mundo entero hubiera desapareci­do.

Natha escribió:Deseando encotrar el camino de la periferia al centro... y en el retorno encontrar los pasos que me lleven hasta casa.

La meditación es volver a CASA

Hay en ti dos planos: el plano de lo mental y el plano de lo no mental. O bien, permíteme ponerlo en estos tér­minos: el plano en el cual estás en la periferia de tu ser, y el plano en el cual estás en el centro de tu ser. Todo círculo tiene un centro, que puedes conocer, o no. Tal vez ni siquiera sos­peches que hay un centro, pero debe haberlo. Eres una periferia, eres un círculo: hay un centro. Sin un centro, no podrías existir. Hay un núcleo de tu ser.

En ese centro, ya eres un Buda, un siddha, alguien que ya ha llegado al centro. En la periferia, estás en el mundo: en la mente, en los sueños, en los deseos, en las ansiedades, en mil y un juegos. Y eres las dos cosas.

Poco a poco, puedes ir pasando de la periferia al centro y del centro a la periferia, muy suavemente, así como entras y sales de tu casa caminando. No creas una dicotomía. No dices: "Estoy afuera de mi casa, ¿cómo pue­do entrar?" No dices: "Estoy dentro de mi casa, ¿cómo puedo salir?" Hay sol afuera, está cálido y agradable. Te sientas afuera, en el jardín. Luego, ha­ce más y más calor, y comienzas a transpirar. Entonces, ya no es agrada­ble: simplemente, te levantas y entras a la casa. Allí está fresco; no es incó­modo. Ahora, está agradable. Sigues entrando y saliendo.

De la misma manera, un hombre con capacidad de conciencia y de comprensión pasa de la periferia al centro, y del centro a la periferia. No se queda estancado en ningún lugar. De la plaza comercial al monasterio, del sansar al sannya, de estar extro­vertido a estar intravertido. Sigue mo­viéndose continuamente, pues éstas son sus dos alas, no se oponen. Pue­den estar equilibradas en direcciones opuestas; tienen que estarlo. Si las dos alas estuvieran del mismo lado, el pájaro no podría levantar vuelo hacia el cielo. Deben estar en equilibrio, tie­nen que estar en direcciones opuestas, pero igual pertenecen al mismo pája­ro y le sirven al mismo pájaro. Tu in­terior y tu exterior son tus dos alas. Hay que recordar esto con mucha pro­fundidad, ya que hay una posibili­dad... de que la mente tenga una ten­dencia a quedarse estancada. Hay gente que se queda estancada en la plaza comercial y dice que no puede salir de ella y que no tiene tiempo pa­ra la meditación. Afirman que, aunque tuvieran tiempo, no sabrían cómo meditar y que no creen que sean capa­ces de hacerlo. Dicen ser mundanos: ¿cómo podrían meditar? Son materia­listas: ¿cómo podrían meditar? "Des­graciadamente, soy extravertido, ¿có­mo volverme hacia mi interior?", di­cen. Han elegido una sola de sus alas. Y, por supuesto, es natural que esto provoque cierta frustración. Con una sola ala, seguro que habrá frustración.

Por otro lado, hay gente que se cansa del mundo y escapa de él: acu­den a los monasterios y al Himalaya, se transforman en sannyasins, mon­jes. Empiezan a vivir aislados, forzán­dose a una vida de encierro en sí mis­mos. Cierran los ojos, cierran todas sus puertas y sus ventanas, se transfor­man en mónadas (sin ventanas) de Leibnitz y entonces se aburren.

En la plaza comercial, estaban har­tos, estaban cansados, frustrados. Se estaba transformando en un manico­mio; no podían hallar descanso. Ha­bía demasiadas relaciones y pocas va­caciones, no tenían espacio suficiente para ser ellos mismos. Estaban cayen­do en las cosas, perdiendo su esencia. Se volvían cada vez más materialistas y cada vez menos espirituales. Esta­ban perdiendo su rumbo. Estaban per­diendo la conciencia misma de existir. Huyeron. Hartos, frustrados, se esca­paron. Ahora, están tratando de vivir aislados, haciendo una vida introver­tida. Más tarde o más temprano, se aburren. Nuevamente, han elegido otra ala, pero otra vez eligen una sola. Éste es el camino de una vida asimé­trica. Han caído nuevamente en la misma falacia pero del polo opuesto.

No estoy a favor ni de ésta ni de la otra. Me gustaría que fueras capaz de permanecer en la plaza comercial y, al mismo tiempo, de ser meditativo. Me gustaría que te relaciones con la gen­te, que ames, que te muevas en miles de relaciones (que te enriquecen) y aun así puedas cerrar las puertas y a veces puedas tomarte un descanso de toda relación, para poder relacionarte también con tu propio ser.

Relaciónate con otros, pero tam­bién contigo mismo. Ama a los de­más, pero también a ti mismo. ¡Sal! El mundo es hermoso, está lleno de aventuras; es un desafío, y te enrique­ce... ¡No te pierdas la oportunidad! Siempre que el mundo llame a tu puerta y te convoque, ¡ve! Enfréntalo sin temor: no hay nada que perder; tienes todo por ganar.

Pero no te pierdas. No sigas más y más hasta perderte. A veces, retorna a casa. A veces, olvídate del mundo:

ésos son los momentos de medita­ción. Cada día, si quieres ser equili­brado, debes equiparar lo interior y lo exterior. Ambos deben tener el mismo peso, de manera que tu interior nunca se torne asimétrico.

Esto significa la afirmación del maestro zen: "Camina en el río, pero no dejes que el agua te toque los pies." Está en el mundo, pero no seas del mundo. Está en el mundo, pero no dejes que el mundo esté en ti. Cuando llegas a casa, llegas a casa: como si el mundo entero hubiera desapareci­do.

Ahh! La sensación de retorno al origen, no de volver a casa, casas hay muchas, sino de volver AL HOGAR.

El Prajna-Paramita, el Vacío Iluminador, la naturaleza búdica.

Namasté!!!

P.D.: COMICS DIGITALES

[Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]

Tao mi corazón no entiende de definiciones, pero si... será eso, el anhelo del retorno al Hogar.
Namaste.

Namasté!!!

Comparto una de las meditaciones activas de Osho..(creo que ya la compartí antes.. , ya perdi la cuenta)...

Pero además compartir una experiencia relatada por mi amigo (con su permiso la expongo)
Saludos!!

OSHO SUFI SIN DIMENSIONES
Una danza para centrarnos y una buena preparación para girar. Esta meditación de Osho está originada en movimientos creados por Gurdieff. Dura una hora y es en tres etapas.

La primera: Es un set de movimientos coordinados con la respiración.
La segunda: Es girar.
La tercera: Es tenderse con ojos cerrados integrando las energías.
"
El baile giratorio sufi, es una de las técnicas meditativas mas ancestrales y poderosas.
Es tan profunda que incluso la primera experiencia puede cambiarte completamente.
Gira como un trompo, con los ojos abiertos, al igual que esos niños pequeños que dan vueltas y más vueltas, como si tu ser interior se hubiera convertido en el centro y tu cuerpo se hubiese transformado en una rueda que gira, en un torno de alfarero en movimiento.
Tu estas en el centro pero todo el cuerpo se está moviendo." Osho -

Experiencia :

En la Primera etapa de 30 minutos: Más allá de estar concentrado en el ejercicio, como dijo Shaida, desde el hara, conectando con el Corazón, proyectando hacia los cuatro puntos cardinales la energía, disfruté de cada momento de la etapa.

Me desorienté dos veces, esto me pasó por querer mejorar los movimientos, disfrutando y volviendo rápidamente a la sincronización del grupo, a esa sinergia que se dio. La sensación de un hormigueo en mis manos, cara. La sensación del ser consciente de “estar”. La respiración también fue clave a la hora de realizar el ejercicio, con intención como dice una amiga.

Rescato el haber sido consciente del “estar” haciendo el ejercicio, recordándome al Tai-Chi. De apoco fui percibiendo como mi cuerpo se fundía con el todo, silenciando mi mente y conectándome desde el hara, sólo “estaba”. Cerré los ojos y pude verme en energía, confié en mis instintos, no me perdí al cerrarlos, al contrario, pude mejorar el ejercicio y me sentí fluyendo en la Energía.

En la segunda etapa, al observar mi mano izquierda y la mano derecha proyectándola hacia el planeta, desde el hara logré visualizar que Yo era la Energía, La Fuente, La Luz, disfrutando, con la Intención de estar en el lugar. Al mirar mi mano, pude verla tal cual es, a un ritmo conectado conmigo mismo, con el Universo, al ritmo de la música, desde menos a más disfrutando con la energía que se generó en la primera etapa.
En la tercera etapa, cuando tuve que colocarme cubito abdominal, mi energía se fundió, por un instante, con el planeta, consciente de mi respiración el cual mis pulmones y diafragma se expandían a ratos, exhalando, provocándome alivio y mucho bienestar.
A cada meditación asistida, de la mano con la “intención” de disfrutar de cada una con el vivir el momento, he ido experimentando, cada vez se me hace más fácil conectar tanto con los ejercicios como con la energía. Aplicando también otros conceptos como “Darle Sentido al día”, “Conectar con el Ser Real desde el primer aliento consciente al despertar hasta el último respirar consciente antes de irme a dormir”.
Toda ésta experiencia de la mano y consciente de activar los siete sellos, ir reconociéndolos integrándolos y expandiéndome a la medida que mis estados así lo permitan. Disfrutando.
El espectro y las sensibilidades se abren, activan. Entonces surge la pregunta, ¿Qué decido hacer con ésta energía?. Capacidad de moverme.
Guardian

[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]

[Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]

Otro aspecto o variante del Árbol de la Vida (Qabbalah)

tao2012 escribió:

Qué diver las meditaciones dinámicas de Osho! Eso es revolucionario sin seriedad, con informalidad pero con respetabilidad.

No vayamos, por cierto, a confundir "meditacion en acción" con la IMPOSICIÓN de manos del Reiki, eso no es nada espiritual, es cosa intelectual & nace de la personalidad, nunca del Ser, no existe un maestro auténtico que "enseñe Reiki", ya que el Rei-Ki verdadero reside en el propio Ser.

Por ejemplo: ¿Cómo curaba Cristo a los leprosos? (Cristo & no Jesús) Tocándolos!!! ¿Puede haber amor más grande? Pero, ¿estaba "practicando Reiki" o no? Él responde: "Tu Fe te ha curado". ¿Entonces no ha sido Él con las manos? ¿No podían haberse curado de otra forma, por ejemplo tocándole el manto? Alguien se curó así, Él lo notó, preguntando luego "¿quién ha sido?".
¿Qué decir también al respecto de "una sola palabra tuya bastará para curarme"?

Pero no olvidemos una cosa, la curación espiritual no necesariamente conlleva sanación visible o material, pueden o no ir a la par, según qué casos (karma / Dharma).

¿Qué decir también, aprovechando la ocasión, acerca de los "mercaderes del templo"? Aquellos que venden cursos de Reiki o dan ascensos en las órdenes espirituales (1ª cámara, 2ª cámara, 3ª), así, por las buenas, cuando todo eso es gratuito (de "gratia", "gratis", "gracia") así como un "don" del espíritu, en los Mundos Internos, mientras el aspecto personalidad dormita, inconsciente de lo que ocurre, a menos que por alguna razón deba recordarlo, razón siempre humilde, no para ensalzarse ("Aquel que se ensalce será humillado, aquel que se humille será ensalzado").

Namasté!!!

P.D.: Gracias por permitirme este inciso o aclaración del verdadero aspecto de la "meditación en acción" (entrega sin condiciones ni imposiciones), Wu-Wei, Karma-Yoga.

[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]

[Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]

Otro aspecto o variante del Árbol de la Vida (Qabbalah)

No encuentro nada, en lo que has dicho, que contradiga lo que yo pienso... Para mi el Reiki es eso, la misma energía que está en todas las cosas, en todos los seres...
Yo no he pagado ni un euro, ni un peso, para aprender reiki... ni pagaría... Pero creo que es bueno que alguien pueda indicarte cómo conectar con esa energía y qué puedes hacer para ser un canal... los tipos de respiración que puedes utilizar para potenciar el flujo de esa energía, como alinear tus centros energéticos y desbloquearlos... No digo que no pueda hacerlo uno mismo, sin necesidad de un maestro... pero es una gran ayuda.. Y en ese sentido me parece positivo que hayan maestros de Reiki o de Qi Gong o de cualquier otra disciplina que trabaje con la energía universal (siempre que no hagan negocio de ello)... no importa el nombre que se use o la técnica especial que uno aprenda para hacerlo... es lo mismo.
Cuando se da reiki a alguien y ese alguien siente una mejoría, no es quien funciona como canal quien lo ha sanado, sino esa energía disponible que está en todas las cosas, el canal sólo es canal. No pone ni quita nada... En este proceso la personalidad no tiene ningún papel, mucho menos protagonismo... La personalidad (ego) ha de quedar fuera de esto... por eso es también meditación.
Pero para poder ser canal y conectar con esa energía, es verdad que tienes que tener tu propia energía equilibrada porque sino esa energía no puede fluir a través de ti... Si eso ocurre, tampoco pasa nada negativo, simplemente la energía no se canaliza. Eso es lo que creo, por eso te decía que para mi, no es posible no ser un canal puro... En la medida en que tu propia energía vital está equilibrada, puedes ser un canal más o menos poderoso. Así, en el caso de Jesús, si existió, debía ser un canal muy poderoso, muy limpio, a través del cual esa energía podía fluir libremente y sin restricciones.
Me parece muy mal que la gente trate de hacer negocio con estas cosas... pero la gente hace negocio con todo, así somos, así nos han educado y es lo que valora la suciedad... digo, la sociedad.

Bueno, pues eso, creo que no estamos tan en desacuerdo... Uso el Reiki pero no me considero reikista, de echo, no quepo dentro de ningún -ista. Soy un ser libre o, al menos, eso quiero.
Gracias a ti por compartir!
Namasté!

PD. A mi tampoco me gustan las imposiciones.. por eso procuro no usar esa palabra...