ESPAÑA SALE A LA CALLE ,EN CONTRA DE LA POLITICA DEL PP

Cepheus escribió:Pongamos los puntos sobre las ies.

Esta muerte, era como el titulo de un libro "Cronicas de una muerte anunciada", se veía venir, no solo por las diferencias y la prepotencia de la fallecida, sino porque "la gente lleva aguantando demasiados atropellos, demasiada chulería por parte de la derecha", en la cual incluyo al PSOE.
No sé si se puede llamar asesinato a esto, porque entonces ¿qué nombre le debemos poner a lo que lleva haciendo el gobierno con mucha gente de este pais?

Si esto es violencia, si esto es terrorismo, como seguramente dirán muchos, entonces el PP y el gobierno oligárquicos son unos genocidas.

Por último, lo de esta señora, solo ha sido un aviso...

russi escribió:Manos arriba


Observen estas manos cansadas; manos cuyas huellas deben estar ya completamente desdibujadas; manos que, en breve, se confundirán entre el carbón que acarician.
Todos conocemos manos así, manchadas por el esfuerzo de cualquier trabajador: mineros, electricistas, mecánicos, obreros… manchadas por fuera pero limpias por dentro.
Existen, en cambio, otras que, a pesar de estar todo el día tocando dinero negro, nunca llegan a ensuciarse. Son suaves, de manicura perfecta y piel hidratada; acostumbradas a acariciar volantes de cuero, trajes de seda y cuberterías de plata. Manos blancas pero podridas por dentro. Y aún así, son estas últimas las que se suelen -se solían- estrechar con más respeto, entusiasmo y admiración.
Cada semana, como las setas tras la lluvía, surgen nuevos casos de corrupción donde hay políticos que se embolsan dinero con la “misma facilidad” con la que usted intenta reunirlo para el siguiente pago de la hipoteca. Afortundamente, estos casos sirven para recordarnos que vivimos en una auténtica democracia, pues la corrupción afecta tanto a la mano izquierda como a la derecha.
El problema es que nos hemos acostumbrado tanto a esta situación que ya nos parece como normal. Nos parece normal que los dos mismos partidos que han robado a diestro y siniestro ahora se vuelvan a presentar a las elecciones sin ningún tipo de vergüenza. Que los dos mismos partidas que en cada ciudad, pueblo, comunidad… vivieron años de bonanza y no fueron capaces de ahorrar un solo euro para las arcas municipales, ahora nos vuelvan a pedir el voto. El problema… que nosotros aún se lo daremos.
En fin, visto que los españoles somos incapaces de -por una vez en la vida- votar algo distinto y así poder echar a estos sinvergüenzas, les sugiero al menos lo siguiente: cada vez que vean a un político -alcalde, concejal, ministro…- guarden todos los DON, ILUSTRÍSIMA, EXCELENCIA… para los ciudadanos que, como el de la foto, consiguen con su trabajo que un país siga adelante.
Me despido hoy, entre rabia, con una frase de Groucho Marx que pondría en boca de la mayoría de nuestros gobernantes:
“Estos son mis principios. Si a usted no le gustan, tengo otros“
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russi escribió:

russi escribió:Manos arriba


Observen estas manos cansadas; manos cuyas huellas deben estar ya completamente desdibujadas; manos que, en breve, se confundirán entre el carbón que acarician.
Todos conocemos manos así, manchadas por el esfuerzo de cualquier trabajador: mineros, electricistas, mecánicos, obreros… manchadas por fuera pero limpias por dentro.
Existen, en cambio, otras que, a pesar de estar todo el día tocando dinero negro, nunca llegan a ensuciarse. Son suaves, de manicura perfecta y piel hidratada; acostumbradas a acariciar volantes de cuero, trajes de seda y cuberterías de plata. Manos blancas pero podridas por dentro. Y aún así, son estas últimas las que se suelen -se solían- estrechar con más respeto, entusiasmo y admiración.
Cada semana, como las setas tras la lluvía, surgen nuevos casos de corrupción donde hay políticos que se embolsan dinero con la “misma facilidad” con la que usted intenta reunirlo para el siguiente pago de la hipoteca. Afortundamente, estos casos sirven para recordarnos que vivimos en una auténtica democracia, pues la corrupción afecta tanto a la mano izquierda como a la derecha.
El problema es que nos hemos acostumbrado tanto a esta situación que ya nos parece como normal. Nos parece normal que los dos mismos partidos que han robado a diestro y siniestro ahora se vuelvan a presentar a las elecciones sin ningún tipo de vergüenza. Que los dos mismos partidas que en cada ciudad, pueblo, comunidad… vivieron años de bonanza y no fueron capaces de ahorrar un solo euro para las arcas municipales, ahora nos vuelvan a pedir el voto. El problema… que nosotros aún se lo daremos.
En fin, visto que los españoles somos incapaces de -por una vez en la vida- votar algo distinto y así poder echar a estos sinvergüenzas, les sugiero al menos lo siguiente: cada vez que vean a un político -alcalde, concejal, ministro…- guarden todos los DON, ILUSTRÍSIMA, EXCELENCIA… para los ciudadanos que, como el de la foto, consiguen con su trabajo que un país siga adelante.
Me despido hoy, entre rabia, con una frase de Groucho Marx que pondría en boca de la mayoría de nuestros gobernantes:
“Estos son mis principios. Si a usted no le gustan, tengo otros“
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Divertido7 escribió:

russi escribió:

russi escribió:Manos arriba


Observen estas manos cansadas; manos cuyas huellas deben estar ya completamente desdibujadas; manos que, en breve, se confundirán entre el carbón que acarician.
Todos conocemos manos así, manchadas por el esfuerzo de cualquier trabajador: mineros, electricistas, mecánicos, obreros… manchadas por fuera pero limpias por dentro.
Existen, en cambio, otras que, a pesar de estar todo el día tocando dinero negro, nunca llegan a ensuciarse. Son suaves, de manicura perfecta y piel hidratada; acostumbradas a acariciar volantes de cuero, trajes de seda y cuberterías de plata. Manos blancas pero podridas por dentro. Y aún así, son estas últimas las que se suelen -se solían- estrechar con más respeto, entusiasmo y admiración.
Cada semana, como las setas tras la lluvía, surgen nuevos casos de corrupción donde hay políticos que se embolsan dinero con la “misma facilidad” con la que usted intenta reunirlo para el siguiente pago de la hipoteca. Afortundamente, estos casos sirven para recordarnos que vivimos en una auténtica democracia, pues la corrupción afecta tanto a la mano izquierda como a la derecha.
El problema es que nos hemos acostumbrado tanto a esta situación que ya nos parece como normal. Nos parece normal que los dos mismos partidos que han robado a diestro y siniestro ahora se vuelvan a presentar a las elecciones sin ningún tipo de vergüenza. Que los dos mismos partidas que en cada ciudad, pueblo, comunidad… vivieron años de bonanza y no fueron capaces de ahorrar un solo euro para las arcas municipales, ahora nos vuelvan a pedir el voto. El problema… que nosotros aún se lo daremos.
En fin, visto que los españoles somos incapaces de -por una vez en la vida- votar algo distinto y así poder echar a estos sinvergüenzas, les sugiero al menos lo siguiente: cada vez que vean a un político -alcalde, concejal, ministro…- guarden todos los DON, ILUSTRÍSIMA, EXCELENCIA… para los ciudadanos que, como el de la foto, consiguen con su trabajo que un país siga adelante.
Me despido hoy, entre rabia, con una frase de Groucho Marx que pondría en boca de la mayoría de nuestros gobernantes:
“Estos son mis principios. Si a usted no le gustan, tengo otros“
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Divertido7 escribió:

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russi escribió:Manos arriba


Observen estas manos cansadas; manos cuyas huellas deben estar ya completamente desdibujadas; manos que, en breve, se confundirán entre el carbón que acarician.
Todos conocemos manos así, manchadas por el esfuerzo de cualquier trabajador: mineros, electricistas, mecánicos, obreros… manchadas por fuera pero limpias por dentro.
Existen, en cambio, otras que, a pesar de estar todo el día tocando dinero negro, nunca llegan a ensuciarse. Son suaves, de manicura perfecta y piel hidratada; acostumbradas a acariciar volantes de cuero, trajes de seda y cuberterías de plata. Manos blancas pero podridas por dentro. Y aún así, son estas últimas las que se suelen -se solían- estrechar con más respeto, entusiasmo y admiración.
Cada semana, como las setas tras la lluvía, surgen nuevos casos de corrupción donde hay políticos que se embolsan dinero con la “misma facilidad” con la que usted intenta reunirlo para el siguiente pago de la hipoteca. Afortundamente, estos casos sirven para recordarnos que vivimos en una auténtica democracia, pues la corrupción afecta tanto a la mano izquierda como a la derecha.
El problema es que nos hemos acostumbrado tanto a esta situación que ya nos parece como normal. Nos parece normal que los dos mismos partidos que han robado a diestro y siniestro ahora se vuelvan a presentar a las elecciones sin ningún tipo de vergüenza. Que los dos mismos partidas que en cada ciudad, pueblo, comunidad… vivieron años de bonanza y no fueron capaces de ahorrar un solo euro para las arcas municipales, ahora nos vuelvan a pedir el voto. El problema… que nosotros aún se lo daremos.
En fin, visto que los españoles somos incapaces de -por una vez en la vida- votar algo distinto y así poder echar a estos sinvergüenzas, les sugiero al menos lo siguiente: cada vez que vean a un político -alcalde, concejal, ministro…- guarden todos los DON, ILUSTRÍSIMA, EXCELENCIA… para los ciudadanos que, como el de la foto, consiguen con su trabajo que un país siga adelante.
Me despido hoy, entre rabia, con una frase de Groucho Marx que pondría en boca de la mayoría de nuestros gobernantes:
“Estos son mis principios. Si a usted no le gustan, tengo otros“
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Cepheus escribió:Me hace gracia que se queje el pueblo por las leyes que no se cumplen y sin embargo cada cuatro años se siguen cometiendo los mismos errores, o se mira a otro lado porque las alternativas como PODEMOS, o Partido X, se ven desde el prisma o los dogmas impuestos por la oligarquía existente y elegida "por muchos" de manera ciega, o consciente.
Os diré una cosa
Yo he hablado muy negativamente de esta gente, siempre he sido muy exceptico, y a mi no me van a buscar trabajo, ni van a trabajar por mi, hasta es posible que también acaben "abducidos" por lo atractivo y tentador que resulta el poder o el dinero´, pero visto lo visto, es un riesgo que hay que correr si uno quiere mantenerse en un sistema politico y burocrático como este, y tener al menos una mínima esperanza de que esta gente mire para esa parte del pueblo que se levanta a las tantas, los seis o siete dias de la semana.
Lo queramos o no, trabajar tendremos que trabajar.
Pero no es lo mismo trabajar para que todo lo que se consigue y crea vaya a parar a manos de cuatro "vampiros y dictadores", que trabajar para que mitad se quede en casa, y la otra sirve para arreglar carreteras, hacer colegios, hospitales, etc.
¿O es que realmente queremos vivir en el Reino de Jauja?
¿De que nos vale quejarnos si no somos capaces de diferenciarnos de los que nos arruinan la vida?
A mi también, igual que a TODOS nos gustaría que nos diesen una oportunidad, pero sucede que, cuando aparece algo nuevo, discrepamos, queremos y no queremos desprendernos de la piel vieja.
¿Qué vino primero, el huevo o la gallina?
Mientras el pueblo debate esto, los del poder y sus amiguetes han llegado, y aprovechando la distracción del debate, se han llevado el huevo y la gallina...