SEGUIMIENTO METEOROLÓGICO...

Aunque no se han ofrecido cifras oficiales sobre el número de decesos a causa de las altas temperaturas, un alto funcionario del Andhra Pradesh dijo que solo en ese sureño estado han muerto más de 500 personas.

A la espera de unas tardías lluvias monzónicas, la India boquea bajo una ola de calor que ya ha matado a más de 500 personas, principalmente en el sur y este del país.

En todo el territorio nacional las temperaturas superan los 45 grados centígrado y la resequedad del aire es tal que agrieta la piel y los labios, mientras en algunas zonas las tormentas de arena contribuyen a configurar un ambiente asfixiante.

Aunque no se han ofrecido cifras oficiales sobre el número de decesos a causa de las altas temperaturas, un alto funcionario del Andhra Pradesh dijo que solo en ese sureño estado han muerto más de 500 personas.

El calor también se ha cobrado 62 vidas en el norteño territorio de Uttar Pradesh y 35 en el noroccidental de Rajastán. Otros estados también han reportado fallecidos, pero de modo irregular, lo que ha impedido consolidar cifras regionales o a nivel de país.

En Nueva Delhi, la capital, un vecino del barrio de Vasant Kunj dijo a Prensa Latina que el martes último, poco después del mediodía, el termómetro que tiene instalado en su jardín marcó 48 grados.

Fuentes de los hospitales capitalinos, entretanto, indicaron que están recibiendo a un número inusualmente alto de pacientes con síntomas de deshidratación y problemas respiratorios, principalmente ancianos y niños.

El Departamento de Meteorología pronosticó que las lluvias del monzón aún tardarán unos días en entrar por el sureño estado de Kerala e ir subiendo hacia el norte para llevar al resto del país un relativo alivio a las altas temperaturas.

Las precipitaciones, empero, también traerán riesgos como la proliferación de mosquitos y el surgimiento de enfermedades como el dengue y las diarreas.

Los fuertes vientos derribaron árboles y cableado en zonas del norte de Nueva Inglaterra el domingo, los vuelos sufrieron retrasos en la ciudad de Nueva York y hubo reportes de un tornado en Carolina del Sur mientras la Costa Este se preparaba para enfrentar el remanente de un violento sistema climático que cobró 10 vidas en Oklahoma.

Fuertes lluvias, tormentas eléctricas, vientos y granizo avanzaron por secciones del noreste del país el domingo por la tarde. El Servicio Meteorológico Nacional emitió una alerta de una violenta tormenta eléctrica y notificaciones en Vermont, Nueva Hampshire y la mayor parte de Maine. En Carolina del Sur, las autoridades atendieron reportes sin confirmar de un tornado, dijo Jessica Ashley, una supervisora para el centro de emergencias del Condado de Anderson. El Departamento de Bomberos respondió a un reporte de daños en el techo de una vivienda y hubo llamadas para reportar árboles derribados. No hubo personas lesionadas. El servicio meteorológico informó que las tormentas eléctricas y vientos por encima de los 96,5 kilómetros (60 millas) por hora en Vermont produjeron granizo de 2,5 centímetros (una pulgada) de diámetro y derribaron numerosos árboles y cableado. Vientos de más de 112 km/h En Maine, los radares detectaron una line tormentas eléctricas capaz de producir granizo y vientos superiores a los 112,65 kilómetros (70 millas) por hora. Los meteorólogos advirtieron de tornados. Los pronósticos de tormentas en la región de la ciudad de Nueva York produjeron retrasos en los aeropuertos más importantes. El aeropuerto internacional John F. Kennedy hubo retrasos de aproximadamente dos horas en vuelos de salida, mientras que en Aeropuerto La Guardia se retrasaron cerca de tres horas, y en el Aeropuerto Newark Liberty se registraron retrasos de más de tres horas en vuelos de llegada a Nueva Jersey. En la zona sur de Estados Unidos, se esperaban tormentas eléctricas, fuertes vientos y granizadas como parte de un frente frío que avanza lento. Fuertes lluvias podrían generar inundaciones repentinas en algunas zonas, informó el servicio meteorológico. Y Oklahoma se recupera... otra vez Mientras tanto, habitantes en Oklahoma realizaban labores de limpieza después de que las tormentas causaron la muerte de 10 personas en el estado, entre ellas tres veteranos perseguidores de tormentas. Tim Samaras; su hijo, Paul Samaras; y Carl Young murieron el viernes. El Centro de Predicciones de Tormenta en Norman, Oklahoma, indicó que los hombres participaban en una investigación de tornados. La gobernadora indicó que la cifra de muertos podría aumentar mientras las cuadrillas de emergencia siguen buscando a personas desaparecidas La gobernadora de Oklahoma, Mary Fallin, hizo un recorrido a la zona de los daños en El Reno, aproximadamente a 48,3 kilómetros (30 millas) de Oklahoma City. La gobernadora indicó que la cifra de muertos podría aumentar mientras las cuadrillas de emergencia siguen buscando a personas desaparecidas perdidas en áreas inundadas. En Misurí, las áreas al oeste de San Luis sufrieron daños graves tras el paso de un tornado el viernes que trajo consigo vientos de 241,4 kilómetros (150 millas) por hora. En el Condado de St. Charles, al menos 71 hogares presentaron serios daños y otros 100 tuvieron daños de ligeros a moderados, reportó la vocera del condado, Colene McEntee. Cinco tornados azotaron la zona metropolitana de Oklahoma City el viernes, de acuerdo con el servicio meteorológico. Fallin agregó el domingo que 115 personas resultaron lesionadas.

Las fuertes lluvias están causando inundaciones en numerosas regiones de Austria, donde dos personas están desaparecidas y cientos han tenido que ser evacuadas por la subida de las aguas.



Las regiones más afectadas por las lluvias y los desprendimientos de tierras son el Vorarlberg, Tirol, Salzburgo, la Alta Austria, Estiria y la Baja Austria, informa hoy la emisora pública ORF.

En Salzburgo dos personas siguen desaparecidas, mientras que una mujer fue rescatada después de caer con su vehículo a un río.



La región de Pinzgau, en el estado Salzburgo, está incomunicada por las aguas y fue declarada zona de emergencia por las autoridades de protección civil.

También la ciudad de Salzburgo, uno de los centros turísticas más importantes del país, se encuentra en peligro ante las incesantes subidas del río Salzach, que está por salirse de sus cauce.

Un corresponsal de la televisión ORF calificó hoy la situación en Salzburgo como "dramática", ya que el nivel del río Salzach ha alcanzado unos insólitos 8,3 metros de altura, solo 20 centímetros por debajo del límite tolerable.

Las unidades de bomberos, con cientos de efectivos, no paran de intervenir en numerosas regiones del país.

En Alta Austria, en la parte oeste del país alpino, cientos de habitantes de la localidad de Ettenau tuvieron que abandonar sus casas por la subida de las aguas del río Salzach.

Varias regiones de este estado se encuentras aisladas y no puede accederse a ellas por carretera.

También en la ciudad de Steyr, en Alta Austria, las aguas han inundado los primeros sótanos ante la subida del nivel de los río Enns y Steyr.

Los meteorólogos austríacos no creen que la situación se vaya a tranquilizar en las próximas horas. Las lluvias se trasladan paulatinamente hacia la parte este de Austria, donde se esperan también fuertes subidas de agua, sobre todo en el río Danubio.

Un jefe local de los bomberos de Baja Austria señaló hoy en declaraciones a ORF que esperan "la riada más importante de los últimos 30 años", con niveles hasta 10 metros en el Danubio, lo que sin embargo aún estaría por debajo del límite tolerable de 11 metros

Las autoridades calculan que casi 3.000 personas de cerca de 700 viviendas han recibido órdenes de evacuación debido a un incendio forestal que se acerca a Los Angeles.

El teniente David Coleman, portavoz del alguacil del Condado de Los Angeles, dijo en una conferencia de prensa que esas personas no podrán regresar a sus viviendas hasta por lo menos el lunes, quizás el martes.

Coleman agregó que unas 2.000 personas y 500 viviendas estaban bajo órdenes de evacuación en la comunidad de Lake Elizabeth, y aproximadamente 800 personas de 200 viviendas estaban afectadas en Lake Hughes.

El portavoz agregó que otras 1.000 de 250 viviendas podrían recibir órdenes de evacuación en la comunidad de Green Valley si el incendio se acerca mucho.

El fuego ha arrasado con unos 103 kilómetros (40 millas) cuadrados de maleza en cañones y montañas unos 81 kilómetros (50 millas) al norte del centro de Los Angeles.

Seis viviendas han quedado destruidas y 15 dañadas.

Un incendio cerca de Santa Fe que está fuera de control el sábado por la noche había crecido a 25 kilómetros cuadrados (10 millas cuadradas), con lo que aparentemente se convirtió en el mayor de varios incendios en el oeste de Estados Unidos, y dejó a la ciudad bajo un manto parecido a la neblina. El denso humo también cubrió Gallinas Canyon y Las Vegas, Nuevo México.

El incendio en el Bosque Nacional de Santa Fe, en Nuevo México, arde a sólo 40,5 kilómetros (25 millas) de la ciudad, por lo que la Cruz Roja estableció un albergue de emergencia en una escuela cercana.

Las autoridades pidieron a los residentes de unas 140 casas de veraneo a que evacuaran, mientras equipos de más de 400 combatían las llamas en las comunidades cercanas de Pecos y Tres Lagunas.

Las cuadrillas también desalojaron campamentos y accesos a zonas boscosas en el área mientras trabajan para evitar que las llamas avancen hacia la línea divisoria de la ciudad y áreas más habitadas.

El Departamento de Salud del estado pidió a los residentes en las áreas de Pecos, Santa Fe y Espanola prepararse para el humo y tomar precauciones evitando la actividad física o prolongada al aire libre.

"Las condiciones potencialmente peligrosas para la salud podrían ocurrir en estas comunidades durante la noche y en la madrugada", indicó un comunicado emitido por las autoridades de salud.