Piden que Estados Unidos libere información sobre atrocidades en China

WASHINGTON — Los eventos de la semana pasada, ensombrecieron la reunión entre el vice presidente de la República Popular China, Xi Jinping, y el presidente de Estados Unidos Barack Obama. Xi está siendo desafiado por el gobierno estadounidense para hacer frente a las atrocidades que ocurren en China.

Se cree que durante el fallido intento de deserción de Wang Lijun, funcionario de alto rango del Partido Comunista Chino (PCCh), pudo haber entregado pruebas documentales sobre la sustracción forzada de órganos a practicantes de Falun Gong, una práctica espiritual que el régimen persigue. El régimen chino rutinariamente niega ser autor de la sustracción forzada de órganos de prisioneros.

En conferencia de prensa en el Club Nacional de Prensa este lunes, el Dr. Tsuwei Huang, portavoz de la asociación de Falun Dafa en Washington DC, pidió que el gobierno estadounidense revelara el contenido de la conversación entre el funcionario del PCCh, Wang Lijun, y los oficiales del consulado estadounidense en Chengdu, China.

Wang era jefe de policía y vice alcalde de la metrópoli de Chongqing, entró al consulado estadounidense en Chengdu –ciudad ubicada 4 horas al oeste de Chongqing- el 6 de febrero. Se dice que pidió asilo. Wang fue por largo tiempo el hombre de confianza de Bo Xilai cuando mientras era jefe del PCCh de Chongqing y gobernador de la provincia de Liaoning.

Bo Xilai fue un entusiasta ejecutor en relación a la persecución del régimen chino contra Falun Gong. El Canadá Free Press reportó que 100 muertes debido a torturas habían sido confirmadas durante su mandato como gobernador. Debido a su historia en Liaoning, se han presentado demandas legales en más de 10 países por crímenes contra la humanidad.

Falun Gong (también conocido como Falun Dafa) consiste en una serie de ejercicios y práctica de meditación. Se basa en los principios de Verdad, Compasión, Tolerancia. Esta práctica era muy popular en China; según la administración de deportes chino, en la primavera de 1999 había 70 millones de personas practicando Falun Gong.

La popularidad de Falun Gong atemorizó al ex líder Jiang Zemin, quien en julio de 1999 ordenó la campaña de ‘erradicar’ la práctica.

En la primavera de 2006, La Gran Época publicó la historia de la sustracción forzada de órganos a practicantes de Falun Gong en China. Estos crímenes continúan, según el abogado de derechos humanos internacional David Matas y el ex-secretario del estado canadiense por Asia Pacífico, David Kilgour.

Kilgour y Matas, en un informe de julio del 2006, concluyeron que los practicantes de Falun Gong detenidos fueron la fuente más probable de los 41.500 trasplantes de órganos en China.

Según los informes que circulan en Internet china, Bo Xilai recientemente descubrió que las autoridades centrales del Partido estaban investigando a Wang por corrupción y el uso de torturas en los interrogatorios. Muchos de los asistentes de Wang fueron arrestados por Bo, tres de ellos murieron bajo custodia.

Según informes publicados en Internet, Wang eludió la custodia ordenada por Bo y huyó al consulado estadounidense en Chengdu. El Departamento de Estado de EE.UU. confirmó que Wang pasó la noche en el consulado y que se fue al día siguiente por propia voluntad. Wang fue escoltado fuera del edificio por oficiales que habían viajado por avión desde Beijing.

Bill Gertz, del Washington Free Beacon, citó a un funcionario anónimo que confirmó que Wang pidió asilo. Aparentemente Bo había rodeado el consulado estadounidense con la policía pero los oficiales de Beijing previnieron que Wang cayera en sus manos. Según los blogs chinos, mientras era escoltado por oficiales estadounidenses fuera del consulado, Wang gritó que les había dicho “todo” a los estadounidenses y les había entregado documentos.

Según el Dr. Huang, Wang quebró el “código de silencio” y reveló detalles acerca de su propia participación, como la de Bo Xilai, en la sustracción ilegal de órganos de practicantes de Falun Gong en China.

Junto al Dr. Huang estaba la Sra. Chun Mei Ma, practicante de Falun Gong, quien recibió asilo en EE.UU. luego de ser detenida y torturada por sus creencias dos veces en cuatro años.

Chun Mei Ma, de 42 años y madre de un hijo que permanece en China, derramaba lagrimas mientras relataba a los reporteros las torturas que recibió en prisión, que incluían ser quemada con bastones eléctricos, golpizas, ser privada del sueño y sometida a alimentación forzada.

Cada vez que era detenida le hicieron análisis de sangre y exámenes físicos, no porque las autoridades estubiesen preocupadas por su salud tras las torturas. Los análisis de sangre son necesarios para establecer compatibilidad de trasplante de órganos.

Huang pidió a los chinos que han participado en la persecución, y especialmente en la sustracción de órganos, que den un paso adelante y “expongan las fechorías de los malvados”.

El Dr. Huang le pide a Xi Jinping que durante esta visita escuche su conciencia y haga todo lo posible para detener la persecución.

“Pedimos al próximo líder, Xi Jinping, que inmediatamente pare la persecución a Falun Gong, que lleve a cabo una investigación a fondo de los funcionarios chinos responsables por la persecución y que lleve ante la justicia a los principales responsables”.

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